- 07/03/2013
- Categorías: Cosas de Caza, Otras modalidades de caza
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La caza con arco es la forma de caza más deportiva, respetuosa con el medio ambiente y con una gran aceptación por parte de la sociedad, dentro de la actividad cinegética, que poco a poco va teniendo más adeptos.
Para practicar la caza con arco es necesario, tener adquiridos los conocimientos suficientes sobre el campo y el comportamiento de los distintos animales que intentemos dar caza.
Una vez aprendido a manejar el arco, el éxito solo dependerá del cazador y su destreza, conocimiento y comportamiento en el campo, para conseguir acercarse a una distancia muy corta sobre las piezas, que le garanticen unas probabilidades de cobro altas, resultando por ello una caza deportiva en toda regla.
Esta prueba entre cazador y presa, origina sensaciones indescriptibles, imposible de percibir, en cualquier otra modalidad, por ello cazadores experimentados que han practicado otras modalidades, se están aficionando a practicar la caza con el arco.
El arco es un arma, muy válida para utilizarse en la gestión de especies cinegéticas, apoyándonos en las siguientes cualidades:
– Silenciosa, los movimientos lentos del cazador, el mimetismo con el medio ambiente, carencia de detonaciones, hace que su práctica no influya y altere el comportamiento de las especies animales durante su práctica.
– Selectiva. En todo momento el cazador tiene que divisar a la pieza antes de su captura. Conociendo las características de la misma antes de proceder a su captura
– Segura. Al realizarse los disparos sobre piezas quietas o casi inmóviles, se conoce antes a proceder al disparo, la ubicación de la pieza, la trayectoria de la flecha, por su escaso alcance y el posible riesgo, que conlleve, teniendo controlados los posibles riesgos en todo momento.
– No contaminación acústica. Su práctica carente de detonaciones, evita la contaminación acústica y la consiguiente alarma en la población humana y resto de fauna animal.
– No contaminación del medio ambiente. La flecha es recuperada por el cazador una vez realizado el disparo, debido a su corto alcance.
– Mejora la especie. Las capturas sobre la que se practica su caza, son principalmente los ejemplares más débiles, enfermos o viejos, los cuales tienen disminuidas sus facultades, siendo más fácil el acercamiento y captura, por parte del cazador, por lo tanto mejora la calidad de la especie.
– Caza sostenible. El número de capturas es bajo, siendo los lances de conseguirse aproximarse a distancias excesivamente cortas, los que proporcionan la satisfacción al cazador, y no el número de capturas.
– Vigilancia. Al realizarse en silencio y con movimientos lentos, permite observar durante su práctica, densidades de otras especies e incidencias en el campo, pudiendo informar de inmediato a la guardería o propiedad.
Los motivos anteriormente descritos hacen factible el uso del arco pudiéndose emplear en el control de exceso de población de especies, por daños a la agricultura, peligro con accidentes de tráfico y por enfermedad de la especie.
Las especies a cazar suelen ser:
– Poblaciones de conejos, en zonas de abundante población, actualmente existen municipio declarado con emergencia cinegética por elevadas densidades de conejos, que están originando daños en la agricultura, daños en taludes de carreteras, ferrocarriles, balsas de aceite, balsa de agua, etc?
– Poblaciones de jabalíes, que estén provocando daños en agricultura, fauna e instalaciones tales como campo de golf.
– Poblaciones de depredadores.
– Poblaciones de Cabra montes, con necesidad de control de sarna.
– Poblaciones de Cérvidos con daños en la agricultura y riesgos de accidente de tráfico.
Existen lugares específicos donde únicamente el uso del arco es viable por sus características y no es posible otro tipo de procedimientos. Dichos lugares se enumeran a continuación:
– Zonas de Reserva, donde no se quieren molestar a otras especies animales.
– Zonas de Seguridad, cercana a vías y núcleos de población.
– Zonas de Cultivos Intensivos. Olivos y viñedos.
– Zonas de Policía, cercana a caminos, ríos, arroyos, etc.
Aprovechando el cierre de la veda, y el inicio de las ferias de caza, es el momento para que los organizadores de ferias, cuenten con el apoyo de los cazadores arqueros experimentados, para realizar demostraciones y dar a conocer las cualidades de este arma al resto de cazadores y fomentar la caza más deportiva que se puede practicar dentro de la actividad cinegética.