La nueva cepa viral de la EHV del conejo

La Enfermedad Hemorrágica del Conejo (EHV) fue descrita por primera vez en 1984 en China como una enfermedad aguda, fatal y muy contagiosa del conejo europeo (Oryctolagus cuniculus) causada por un Calicivirus, del género Lagovirus, con una rápida propagación a nivel mundial que se mantiene en la actualidad.

La enfermedad fue detectada por primera vez en España en conejos domésticos en 1988. En conejos silvestres, la enfermedad apareció durante la primavera de 1990, y en sólo dos años el virus se extendió a lo largo de todo el país. Puede trasmitirse de conejo a conejo prácticamente por cualquier vía, sin necesidad de que intervengan vectores biológicos.

Desde el punto de vista patológico, cursa como una hepatitis aguda o sobreaguda (raramente crónica) que suele provocar mortandades superiores al 90% en ejemplares silvestres con más de ocho semanas de vida. Por el contrario, la infección apenas causa mortalidad en los individuos más jóvenes. Durante el año 2010 en Francia se detectaron una serie de brotes de EHV que cursaron de forma atípica, caracterizada por brotes agudos de enfermedad hemorrágica tanto en adultos como en gazapos y en los cuales se identificó, como agente etiológico, una nueva variante del virus relativamente diferente de las aisladas hasta entonces en ese país. Fue identificada como una nueva variante de virus de la Enfermedad Vírica Hemorrágica del conejo. Dicha variante fue detectada por primera vez en España en el año 2011 en explotaciones industriales del tercio norte peninsular. Entre los animales infectados en estos primeros casos, existían algunos que habían sido previamente vacunados.

La nueva cepa de la enfermedad presenta los mismos síntomas que la variante clásica siendo característica de esta variante la afectación de los gazapos menores de 30 días, presentando éstos una severa ictericia (coloración amarillenta de la piel y mucosas) y epistaxis (hemorragia nasal).

Las lesiones primarias consisten en necrosis del hígado y esplenomegalia (agrandamiento del bazo). Sin embargo, la causa de muerte es normalmente una coagulopatía masiva (la sangre no coagula con normalidad) y hemorragias en diversos órganos.

Cuando la situación para el conejo parecía haberse estabilizado en muchas poblaciones silvestres, el reciente hallazgo de esta nueva cepa viral, que afecta también a los ejemplares más jóvenes, ha abierto un nuevo escenario cuyas consecuencias son todavía difíciles de evaluar, que puede echar por tierra más de veinte años de esfuerzos y lucha contra esta temible enfermedad.

Es evidente que el virus causante de la EHV, al igual que ocurrió con otras enfermedades del conejo como la mixomatosis, ha venido para quedarse, aún así no debemos ser alarmistas, pero debemos estar todos en alerta, pera ver cual es la evolución de esta nueva cepa en nuestras poblaciones de conejo, y en base a ello actuar de manera preventiva.



Este sitio web utiliza cookies propias y de terceros, para analizar nuestros servicios y mostrarte publicidad relacionada con tus preferencias, en base a un perfil elaborado a partir de tus hábitos de navegación (por ejemplo, páginas visitadas). Puede configurar, aceptar y rechazar la utilización de cookies u obtener más información AQUÍ.